domingo, 29 de diciembre de 2013

'Belleza serena de ojos tristes.'



        Una promesa siempre es una promesa, aunque se cumpla siete siglos y medio después.
                 
      Aunque supongo que algunos de vosotros ya conoceréis parte de la fascinante historia de la bella princesa nórdica, me gustaría compartir con el resto unas pocas líneas acerca de su vida, de la que pude tener conocimiento en una reciente visita guiada al municipio burgalés que sería en el siglo X capital del infantado de Castilla, la villa de Covarrubias. Sumando a lo que aprendí en mi viaje lo que he podido leer a mi vuelta os cuento:
                
       En el año 1958 estudiando los sepulcros de la Colegiata de San Cosme y San Damián en dicha villa, apareció el cadáver momificado de una mujer con los cabellos rubios intactos, de una altura (poco más de 1,70 m) inusual para las mujeres castellanas de siglos anteriores.  Como indicadores de su alta alcurnia, aparecieron joyas y estaban también incorruptos ropajes con restos de bordados de oro y piedras preciosas.
               
       Se trataba de la princesa Kristina de Noruega, hija del rey Haakon IV de Noruega y nacida en el año 1234 en la localidad noruega de Bergen.
                
      Según nos explicó la guía, vino a Castilla como fruto del acuerdo de nuestro entonces rey Alfonso X (aconsejado por su abuela Berenguela la Grande) con su padre Haakon allá por el año 1257. En primera instancia venía para casarse con nuestro rey, quien casado desde hacía años con Violante de Aragón (hija de Jaime I de Aragón, que en el momento de casarse con él tenía diez años) no conseguía tener descendencia (legítima, pues ilegítima ya tenía) y estaba a punto de repudiarla. De esta  manera se afianzaban las relaciones comerciales y estratégicas entre las dos coronas, tal y como era habitual en la época.
                
      Así, acompañada por un embajador de su país, partió con veintitrés años el verano de ese mismo año la bella princesa desde su país (Tönsberg, cerca de Oslo) en un viaje que le llevaría junto con un séquito de más de cien personas, en una nave vikinga de remo y vela (cargada de un valioso cargamento de oro, plata, pieles preciosas que constituían su dote ), desde su país hasta Inglaterra (el puerto inglés de Yarmouth), para después cruzar el Canal de la Mancha hasta Francia (Normandía), donde comprarían caballos para continuar el viaje y entrar a nuestro país desde Cataluña. Ya en nuestros territorios sería recibida con todos los honores por numerosas comitivas allá por donde pasaba, en particular por el Conde de Gerona (que la recibió con trescientos hombres), y por el propio Jaime I el Conquistador de quien según se cuenta cayó rendido a sus pies y con escaso éxito le propuso matrimonio. También pasaría por Soria, donde fue recibida el 22 de diciembre por el obispo de la ciudad y por el infante Don Luis. Finalmente pasó la Nochebuena en Burgos, tras atravesar Palencia y poco antes de entrar en Valladolid salió a recibirla el propio Alfonso X con todos los honores correspondientes a su linaje, para entrar juntos en la ciudad el 4 de Enero de 1258.
                
      Al parecer, (y en esto hay fechas que no coinciden), para cuando llegó la todavía esposa de Alfonso X, Violante de Aragón  ya estaba embarazada, por lo que para solventar honrosamente el desaguisado, nuestro entonces rey le ofreció elegir para casarse entre sus tres hermanos casaderos (Fadrique, Sancho y Felipe). Eligió al que había sido arzobispo de Sevilla, Felipe de Castilla, se casaron en Valladolid el 31 de marzo de 1.258, y se trasladaron a vivir a Sevilla. En aquella ciudad moriría sin descendencia cuatro años después.
                
      Si como yo, tenéis curiosidad por el tema, podréis leer que aunque no está documentado, en la mayoría de los casos se habla de que murió de tristeza, de añoranza de  su lejana tierra, y en definitiva de no adaptarse a un entorno tan diferente al suyo. También podría haber muerto de meningitis  (en su sarcófago se encontró una receta para tratar el mal de oído con "xugo de ajo"), e incluso algunos historiadores especulan con la posibilidad de que fuera envenenada por Violante (que tenía antecedentes por anteriormente ya haber envenenado por envidia y celos a su propia hermana Constanza), por haber estado secretamente enamorada de Alfonso X desde que salió a recibirla y en resumen, no soportar su presencia en el reino.  Finalmente fue enterrada en la ya citada Colegiata de San Cosme y San Damián de Covarrubias, por haber sido abad de aquel lugar su esposo Felipe.
                
      En cualquier caso, su figura cayó en el olvido hasta que se abrió su sepulcro. Después de aquello, en un tremendo gesto de humanidad, el párroco de Covarrubias viajó a la ciudad de Tönsberg y entregó una réplica del sepulcro con trozos del vestido, siendo acogido el gesto con profundo agradecimiento por los vecinos de la localidad.
                
     Años más tarde, en 1992, se creó la  Fundación Princesa Kristina de Noruega, cuyo patronato hispano-noruego, en colaboración con la Junta de Castilla y León, además del colaborar y fomentar las ya excelentes relaciones entre España y Noruega, se marcó como principal objetivo cumplir la promesa de construir una capilla en su nombre que le hizo el infante Felipe de Castilla a la princesa  tras su boda y que no fue cumplida en su momento por su prematura muerte.


Estatua de la princesa en Covarrubias. (Brit Sørensen,1978
Fuente fotografía: Wikipedia.

                
       Finalmente, el pasado 18 de septiembre de 2011 se inauguró en Covarrubias la capilla de San Olav, y como no puede ser de otra manera si vais por allí por esas fechas cualquier año, no os debe extrañar ver una auténtica feria hispano-noruega ('Notas de Noruega.'), con multitud de visitantes de ambos países, transformando en nórdica con abundante decoración y también entre comida, música y bebida noruegas nuestra antaño capital castellana.

        Espero que os haya gustado esta preciosa historia, y si no lo habéis hecho ya, podéis leer sobre el tema alguna de las escasas obras en castellano,  entre las que destacan por su impacto mediático la reciente novela ‘La flor del Norte.’ de Espido Freire (publicado en 2011), o la también novela ‘Los escarpines de Kristina de Noruega.’ de Cristina Sánchez-Andrade (publicada en 2010). 
      
        Y es que como yo, ambas autoras quedaron fascinadas por la más que intrigante vida de la  belleza serena de ojos tristes.

lunes, 9 de diciembre de 2013

'A la vuelta de la esquina...'


Aún lejos de los cuarenta y me estoy haciendo un batallitas insufrible, lo sé. No quiero ni pensar cómo voy a ser de viejo si llego, pero es que me encanta daros la tabarra con los miles de temas, aficiones o inquietudes que rondan mi cabeza, en fin….

Esta entrada la llevo en mente hace semanas, sin un momento de sosiego para escribirla como a mí me gusta, o sea, sin prisa, con fanta zero (mi genial profe de relatos dice que no es bueno drogarse ni beber para escribir) y mi lista de favoritos de Spotify puesta.

Así que hoy quisiera compartir con vosotros los mejores deberes que he tenido que hacer en los últimos años. Concretamente hace un par de ellos, estudiando estrategia aplicada al mundo empresarial me mandaron resumir las ideas que prefiriera de un fantástico documento que se llama ‘La lista de HBR Ideas innovadoras para 2006.’ Evidentemente la mayoría de ellas eran fundamentalmente relacionadas sólo con el mundo de los negocios, pero otras, en mi opinión las más valiosas también eran extrapolables a nuestra vida personal.

La primera que me gustaría comentar es que según algún premio Nobel el rasgo personal más valioso para el siglo XXI es la capacidad de sintetizar (*). Aunque muchos sabéis que la información generada por la acción humana crece exponencialmente, enfrascados en nuestras vidas diarias, no somos realmente conscientes de lo que está ocurriendo a nuestro alrededor, y sólo podemos sentir vértigo si nos informamos aunque sea un poco sobre el tema. Para que os hagáis una idea, existen muy diversas estimaciones por la red, y a modo de ejemplo algunas ilustran que si consideramos como base la cantidad de información generada por la totalidad de la humanidad hasta 2003, en 2011 esa cantidad se generaba….: ¡Cada dos días!

En definitiva, en el artículo se cita como fundamental saber decidir adecuadamente los criterios bajo los cuales se debe discriminar la información considerada esencial de la que será descartada. Y en resumen, afirma que los líderes serán aquellos que sepan  sintetizar percibiendo relaciones y anomalías que no siempre serán obvias, teniendo por tanto mayor probabilidad de tener ideas y enfoques imaginativos e innovadores.

La segunda y última, se titulaba ‘Riesgo, incertidumbre y duda.’, y desarrollaba estos puntos cruciales en la toma de decisiones, ordenados por dificultad creciente al abordarlos.

El riesgo, explicaba el artículo, se refiere al aspecto expresable en términos probabilísticos de la gestión de lo que desconocemos. Se me ocurren infinidad de ejemplos en nuestra vida diaria, como pueden ser los juegos de azar; a su vez, en el mundo empresarial hay departamentos enteros en grandes bancos y multinacionales dedicadas a los aspectos calculables de análisis de sus futuras inversiones.

La incertidumbre por el contrario, es sencillamente incalculable, y no hay base científica que permita hacerlo, por lo que las relaciones causa-efecto son cada vez más difíciles de descubrir. Actualmente vivimos en un entorno de creciente incertidumbre, entre otras cosas porque el comportamiento de los agentes económicos en un mundo cada vez más globalizado dista mucho de ser racional, siendo predominantemente emocional. Sobre incertidumbre sobran los ejemplos, pero pensad en los efectos en vuestras vidas de lo que hagáis mañana.

Finalmente, la duda también nos espera a la vuelta de la esquina y aparece cuando no existe ningún resultado adecuado, cuando inevitablemente hay que escoger entre dos soluciones malas, o entre diversas opciones que aun siendo buenas acarrean todas ellas desagradables efectos. A modo de ejemplo muy ilustrativo imaginad a un padre aguantando a sus dos hijos en un precipicio con ambos brazos, siendo consciente de que sólo tiene fuerza para salvar a uno. A nivel global la duda está presente en el crecimiento sin control de internet, en la modificación genética de los seres humanos o la tan vigente drástica elección de los estados entre seguridad colectiva y libertad individual.

Y es que amigos, aun sin planteárnoslo la mayoría de nosotros vivimos marcados en mayor o menor medida por la aversión al riesgo y la incertidumbre. No me podréis negar que muchos queremos por ejemplo practicar deportes de riesgo sin riesgo, siendo esto una forma más de autoengaño. La duda, a su vez implica aceptar las diferencias entre los valores en base a los cuales tomamos las decisiones. En este sentido, no tener claros nuestros valores en las decisiones trascendentes de nuestra vida nos aboca a un fracaso casi seguro.

Saber lidiar con todos, implica aceptar las consecuencias de nuestras decisiones y, en definitiva, tomar las riendas de nuestra vida.
(*) Si no me creéis, probad sólo a leer lo escrito en negrita.