martes, 31 de enero de 2012

'Pichis'

       Buenas noches:
       Aquí os dejo un enlace a un corto que me encanta.
           PICHIS

          
            Espero que os guste.Será motivo de futuras entradas.
            Saludos.
            Santi.

domingo, 29 de enero de 2012

'Alicia sabe más de fútbol que yo.'

Supongo que en mi caso, enterarme casualmente de un derbi Madrid-Barça escasas horas antes de que se juegue no es nada raro, pero la verdad es que me ha ocurrido dos semanas consecutivas, y por una vez me ha dado que pensar…
Puesto a ello, siguiendo mi costumbre habitual que ya he comentado en alguna ocasión, con mis viejas deportivas puestas, le he dedicado no pocos kilómetros al asunto por mi adorado paseo de Los Narejos….
Por hacer un breve resumen, tengo que decir que no me gustan fútbol, toros, retransmisiones deportivas en general, programas de corazón, que todo el mundo opine de todo, pasar los fines de semana en centros comerciales, o en general ir de tiendas ‘a ver si veo algo’.
Descartadas las formas de ocio de un importante sector de población de mi querida España, con algo menos de suelas me doy cuenta de que en general no me gustan las cosas que no entiendo. En este sentido, no se trata de que tomando unas cervecitas con cualquiera de vosotros en un ambiente distendido, me disuada de la razón de ser y las ventajas de cualquiera de vuestras aficiones que no comparto, sino de que yo realmente las asimile y las interiorice como propias.
Así que sin saber apenas nada del tiburón de los negocios Warren Buffet, me genera cierta admiración que no tenga reparos en proclamar que ‘no invierte en negocios que no entiende’. Con un par. Y de su secretaria ni hablamos…
Aunque no me cabe duda de que con cierta afición futbolera, este bendito país que habito se haría para mí de repente más habitable, poca fe tengo pensando en que a mis treinta y tantos la Alicia de Carroll es bastante más hábil que yo distinguiendo  la izquierda y la derecha.
Bueno, al menos me gustan el solecito, la cerveza fría y el café caliente así que mis manías y yo de momento nos quedamos una temporada más por aquí.
Prometo no hacer ruido.

domingo, 22 de enero de 2012

'Amaneciendo en el taxi.'

            Escribe Murakami en alguno de sus libros, que no somos mas que portadores de genes, así que supongo que si algún día me reproduzco y tengo pequeños mamíferos a los que llamaré hijos, y éstos a su vez con el tiempo hacen lo propio, teniendo más pequeños mamíferos a los que llamaré nietos, podré contarles batallitas como aquellas veces como la de este jueves en que recorría la mitad del país en taxi para ir y volver a Madrid desde Murcia .           
             Con independencia de que el motivo de mis viajes suelen ser reuniones de trabajo de no más de dos o tres horas, la verdad es que recorrer casi mil kilómetros de un día por carretera (otras veces en avión) viendo amanecer y anochecer, da para pensar sobre lo humano y lo divino, aunque lo que más me maravilla es cómo con el paso de los años reducimos de manera constante los tiempos de viaje a cualquier parte.
            Aun recuerdo cuando un anciano familiar me contaba que ir del Campo de Cartagena a Murcia en carro suponía toda una jornada de viaje, o sin ir más lejos, mi primer viaje a Madrid con ocho o nueve años, por la antigua nacional pasando por infinidad de pueblos, cada uno con su producto típico, como Pedroñeras con sus ajos.
            En cualquier caso, no paro de preguntarme últimamente si tanta prisa es necesaria, si despertarse antes del amanecer es natural y si el actual elogio de lo rápido tiene sentido.
            También estos días, mi reloj se ha quedado sin pilas, mi nuevo smartphone casi siempre está sin batería, la mayor parte del día no sé qué hora es, y mi corazón sigue latiendo una vez por segundo…
           

domingo, 15 de enero de 2012

'De noches de apagones y canciones de 'El último de la fila.''

Siendo fiel a mis costumbres, la pasada noche de reyes paseaba tranquilamente por la playa mientras  la masa del que sería mi primer roscón fermentaba en mi casa, bastante más calentita que yo….
Como siempre, y según he contado alguna vez en otras notas, la playa estaba con su preciosa calma cuando en un instante, se produjo un apagón que afectó  a gran parte de los varios kilómetros de playa de Los Alcázares.
Sin otra compañía que la luna en cuarto creciente (creo recordar), comienzo a andar en solitario completamente a oscuras disfrutando de ese mágico momento e intentando comprobar si la contaminación luminosa había disminuido lo suficiente para ver más estrellas de las habituales…
La verdad es que hacía tiempo que no vivía un apagón, lo que me hizo recordar que eran bastante más frecuentes en mi infancia en Pozo Estrecho, donde era habitual tener velas de reserva.  Tengo que decir que me encantaban, y me sentía en medio de un juego cuando aun a oscuras alguna vez me tocó ir tanteando paredes hasta encontrar las velas. Pero lo que más me gustaba, era que sentía que a la luz de las velas, el tiempo se paraba, las conversaciones familiares eran más auténticas, especiales. Lógicamente, puede que estas sensaciones estuvieran solo en mi cabeza, pero la verdad es que me daba cierta desilusión cuando volvía la luz y según mi teoría, el tiempo se ponía de nuevo en marcha.
Y es que no son pocas las veces que pienso que perseguidos por los hombres grises de Momo vivimos demasiado deprisa, seguimos horarios antinaturales, y  le damos más importancia a acumular pertenencias que a ser nosotros mismos, y comparto lo que dice la canción de 'El último de de la fila'  ‘tanto tienes tanto vales, no se puede remediar'.
No son pocas las veces que he fantaseado pensando que me hubiera gustado nacer al menos un siglo antes, aunque en cuanto recupero el sentido común, me doy cuenta de que idealizo otras épocas obviando el hecho de que me ha tocado vivir en un país desarrollado con la mejor cobertura sanitaria y social de la historia (*).
Pero lo que sí es cierto  es que hay fallos en un modelo económico y social que prácticamente se basa únicamente en el aumento indefinido de la riqueza (PIB), y que ya hay movimientos para incorporar otras variables, intentando definir índices más sostenibles que de alguna manera haga replantearnos como sociedad si vamos en el buen camino.
Mientras tanto, los que somos de pulsaciones bajas, seguiremos fantaseando con huir a una aldea, abrir una casa rural y plantar tomates…


Un abrazo.
Santi.
(*) Para los más curiosos, os enlazo una animación del desarrollo del PIB per cápita, en los últimos 200 años, donde podéis seleccionar naciones, ver sus aumentos de población, los efectos de las guerras…

martes, 3 de enero de 2012

'De Noches de Reyes y viejos tebeos..'

Probablemente con más carbón para algunos, y quizás también con los sacos de regalos algo mermados respecto de otros años, pero todo parece indicar que como manda la tradición Sus Majestades los Reyes de Oriente vuelven a visitarnos en breve…
Como a cualquier zagalico de ahora, la Noche de Reyes me mantenía en vela ilusionado por recibir mis regalos, y recuerdo vivídamente de algunos años el momento concreto en que los abría con el corazón en vilo hasta comprobar que los reyes de nuevo se habían portado bien conmigo.
Es ahora cuando pongo la vista atrás, y siento un agradecimiento infinito a Sus Majestades, que durante años se preocuparon de que no me faltara de nada pero que a la vez no me dedicara a ir por la vida almacenando objetos sin apenas usarlos, además de por mí, por los otros niños que por muy diferentes causas no tenían la oportunidad de visitar…
Aunque evidentemente el carácter también influye en ello, la verdad es que lo aprendido aquellos años me ha hecho tener mucho desapego por acumular pertenencias.
Así que en general si preveo que voy a usar poco algo directamente evito adquirirlo, con independencia de que posteriormente me guste acumular cacharros y recuerdos de una manera casi enfermiza
Como aplicación práctica de esta forma de entender el consumo, por ejemplo, de pequeñico combinaba mi afición a los tebeos con la optimizar mi inversión en los mísmos dedicándome a cambiar los que ya había leído por otros usados sin leer en un quiosquilo de la feria de Los Alcázares muy cercano a nuestra casa de veraneo.

Y es que el estoico quiosquero (Paco creo recordar que se llamaba) era capaz de aguantar hasta casi media hora repasando tebeos de páginas amarillentas y quebradizas a chavales como yo por unas tarifas que iban desde los dos duros para los comics de pequeño formato, como el Don Miki por ejemplo, hasta los cinco duros ( de los de la Colección Olé ), pasando por los tres duros de los de la Marvel.
No sabría decir cuántos tebeos me leí de esta manera, pero todavía quedarán en la casa de la playa un par de docenas, y la verdad es que no recuerdo que nunca me diera pena desprenderme de alguno de ellos.
Años más tarde y ya de adulto, aprendería también que reflejamos lo que somos en todo lo que hacemos, y que los comics no son una excepción a ésto. Como contrapartida a una mayoría de superhéroes americanos fuertes, inteligentes e intrépidos, salvo honrosas excepciones en los tebeos nacionales de mi infancia predominaban los torpes, pícaros y en general tristes perdedores. La verdad es que da que pensar….
Así que cuando oigo de iniciativas como la excelente bookcrossing, le deseo de corazón toda la suerte del mundo en nuestro país.
 Casi tanta como la que le desearía al optimista emprendedor que establezca un sistema de venta de prensa como el de otros países en el que coges libremente tu periódico y voluntariamente lo pagas en un cacharico destinado a tal efecto. ¿O no?

Un abrazo y espero que los reyes se porten bien con vosotros.
Santi.